Seguimos reivindicando las posibilidades que nos ofrece el microondas para preparar recetas muy rápidas, sencillas y también más ligeras. Este electrodoméstico permite imitar los resultados de muchas frituras sin los incordios y las calorías que conlleva, por ejemplo al cocinar almendras. Los pimientos verdes pequeños al microondas son perfectos para disfrutar de un picoteo del finde delicioso en diez minutos.
Podemos utilizar pimientos de Padrón, de Gernika o cualquier variedad de calibre pequeño que encontremos en el mercado. Para los que no toleran bien el picante, es fácil encontrar variedades dulces que son todo un manjar para picotear a cualquier hora, carnosos, jugosos y muy tiernos. Por supuesto, también pueden ser una gran guarnición.
Mi compañero Pakus ya nos enseñó su truco -realmente el mérito es de su abuela- para freír pimientos con aceite y agua logrando una textura muy tierna en el interior con el exterior dorado, sin riesgo de chamuscarlos.
Los pimientos de formato pequeño, también llamados últimamente baby, son ideales para un picoteo precisamente porque se devoran de un bocado. Si hay confianza en la mesa lo mejor es servirlos directamente en una fuente o bandeja para comerlos con las manos.
Lavar bien pero con suavidad los pimientos, procurando que no haya ejemplares dañados. Escurrir y secar con cuidado; no pasa nada si queda algo de humedad, pero que no chorren.
Colocar los pimientos en un recipiente para microondas. Si no tenemos ningún utensilio específico, nos servirá cualquier plato o fuente apta, que permita el giro de la bandeja del aparato pero sin amontonar en exceso los pimientos.
Añadir el aceite de oliva -podemos echar más, pero si la idea es recortar calorías no hace falta- y remover. Agregar un par de pizcas generosas de sal y volver a remover para que se distribuya bien.
Cubrir con una tapa de microondas e introducir en el electrodoméstico. Cocinar a máxima potencia durante tres minutos. Sacar cuidado y remover. Volver a calentar a máxima potencia 4 minutos más. Comprobar el punto y repetir en interalos de un minuto si fuera necesario.
Escurrir el agua que hayan podido soltar y servir en una fuente, con más sal gruesa al gusto y, si se desea, un hilo de buen aceite de oliva virgen extra. Si no tenemos tapa de microondas podemos cubrir el plato con plástico film y perforarlo con un tenedor.
Con qué acompañar los pimientos verdes al microondas
Por sí solos ya son una buena tapa para compartir en el picoteo del finde; no vamos a negar que sientan de maravilla con una buena cerveza, pero se pueden disfrutar igual con agua o un refresco sin azúcar. Maridan muy bien con salazones, frutos secos tostados o encurtidos, como unas sencillas aceitunas de calidad.
Los pimientos verdes fritos al microondas también son además una excelente guarnición de carnes y pescados, y resultan deliciosos para coronar unos huevos o un plato de migas.