Cada año digo que no voy a "picar" con las recetas de Halloween y cada año tengo que tragarme mis palabras, y es que, sobre todo si hay niños en casa, es muy divertido dejarse llevar para elaborar alguna receta estrambótica. Esto es lo que me ha pasado con esta receta para Halloween de cóctel sangriento.
A los niños les dieron tanto asquito los ojos que tuve que quitárselos para que se bebieran el cóctel, que por cierto les gustó mucho. Puede también servirse en vasitos individuales y coronar cada uno con un solo ojo. Imaginación al poder, que para eso estamos celebrando Halloween.
Exprimimos el limón. Lo ponemos en un robot de cocina junto a las frambuesas, el zumo de limón y agua suficiente para conseguir la consistencia que deseemos, entre líquida y espesa, y lo trituramos. Después, lo pasamos por un colador para eliminar las pepitas de las frambuesas.
Repartimos el zumo de frambuesa entre cuatro copas. Formamos 8 bolitas de melón y las repartimos entre las copas. Sobre cada bolita de melón colocamos una pepita de chocolate.
Con qué acompañar el cóctel sangriento
Os aconsejo no colocar los ojos sobre el zumo de frambuesa hasta el último momento, pues tienden a hundirse. Nosotros tomamos esta receta de cóctel sangriento recién sacada de la nevera, la verdad es que aunque ya no haga excesivo calor, fría está deliciosa.
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